No me gusta al cien por cien el acuerdo que mi Partido ha firmado con Ciudadanos, lo mismo que me pasará, casi con total seguridad, con cualquier acuerdo que se pueda firmar con otras fuerzas políticas, puesto que pactar consiste precisamente en eso: renunciar a parte de tu programa electoral, para incluir aspectos de los otros con los que pretendes llegara a acuerdos.
Entonces, ¿por qué voy a votar SÍ?
En primer lugar, y fundamentalmente, porque sigo pensando que Pedro Sánchez es el único dirigente político que puede conseguir un acuerdo con partidos de izquierdas y de centro que le permitirá finalmente configurar un gobierno que saque a este país de la senda de pérdida de derechos y libertades en la estamos. Estoy convencido de que ni en la primera ni en la segunda de las votaciones que se van a producir la próxima semana en el Congreso de los Diputados, se logrará una mayoría que permita formar gobierno. Pero estoy igual de convencido de que, en las semanas próximas, al acuerdo actual con C's se le incorporarán los matices y puntos que sean necesarios, para conseguir el voto de partidos como Podemos e IU, además de otros, que cambiarán el curso de los acontecimientos. Pienso que, contra lo que muchos "listos" han afirmado, la pregunta que se nos somete a los militantes, no cita expresamente el acuerdo con C's para posibilitar esa operación de acercamiento a otras fuerzas políticas, e insisto que confío en que se logrará.
Y en segundo lugar, pero no por ello menos importante, votaré que SÍ, porque muchos de los dirigentes de mi partido que se lanzaron a ponerle a Pedro todo tipo de pegas y límites, lo que le llevaba a solamente poder llegar a acuerdos con Ciudadanos o ¡con el PP!, ahora que lo ha hecho con el primero, no los he oído ni una palabra en defensa del mismo, e incluso algunos y algunas, caso de mi secretario general del Partido en Palencia, critican tanto la propia consulta, como el acuerdo. Lo que me ratifica en el convencimiento, que ya tenía, de que haga lo que haga Pedro Sánchez, estarán en contra.
Por estas razones, y otras menores, me voy ahora mismo a VOTAR SÍ.
No deja de ser sorprendente que un reconocido felipista haya apoyado tanto a Pedro Sánchez habida cuenta de las manifestaciones y declaraciones de Felipe González en la clara dirección de permitir un gobierno del PP.
ResponderEliminarParece que a algunos deberá de ir cayéndoseles el mito de la vaca sagrada. Y que el González del 82 poco o nada tiene que ver con la caricatura en que se ha convertido. Ya no es aquel al que aclamaban al grito de ¡Felipe, capullo, queremos un hijo tuyo! las enfervorizadas socialistas.
Algunos frente al guerrismo se posicionaron entonces con Felipe. Es entendible en la medida en que Guerra de los libros solo se leía las tapas. Y ya dejó muy claro el carácter del personaje Jorge Semprún, que, al menos, este sí tenía cierto fuste intelectual.
Llegados a este punto en que Felipe González, amigo de multimillonarios como Carlos Slim y amigo de las puertas giratorias, se ha dedicado con denuedo a destrozar al pobre Pedro Sánchez, cabe preguntarse si González no fue siempre un timo muy bien encubierto. Generó ilusión y expectativas en su momento y muchos le consideramos el modernizador de España, pero cuando uno reflexiona serenamente sobre la reconversión industrial (necesaria pero muy mal gestionada), las privatizaciones, la "beautiful people", el OTAN de entrada NO al OTAN de cabeza, uno se pregunta si no tendría razón Krahe y, desgraciadamente, Felipe fue ese hombre blanco que hablaba con lengua de serpiente. Es espantoso ver lo que barones (el PSOE siempre ha tenido su aristocracia) y vacas sagradas como González (con su amigo Janli y otros oligopolios mediáticos) han estado haciendo con el pobre Pedro Sánchez por el mero hecho de querer un cambio frente al conservadurismo reaccionario y antisocial del PP. Quizá quien fuera diputado felipista pueda explicárnoslo. Eso sí, "zin acritú".