Hace unos día publiqué en este mismo blog una pequeña entrada sobre el tema. Pero sigo sin aclararme del todo y mantengo serias dudas al repecto.
Mientras tanto, me ha gustado mucho el artículo que con el título que figura en esta entrada, ha publicado hoy en EL PAÍS, Sami Naïr, político y pensador francés de origen argelino, y habitual colaborador de este periódico.
"El Gobierno de Zapatero acaba de anunciar que quiere legislar el uso del velo y del burka, siguiendo en ello a Francia y a Bélgica. Por otro lado, prepara la Ley de Libertad Religiosa que prohibirá con toda legitimidad, entre otras cosas, los símbolos religiosos en los establecimientos públicos. Es la mejor manera de ratificar que los establecimientos de enseñanza son lugares en los que se dispensa un saber certero, y no espacios de competencia entre las pertenencias confesionales."
Leer todo el artículo aquí.
El burka, el pañuelo, etc no son simbolos religiosos -de sumisión a su Dios- sino de simbolos culturales -de sumisión al hombre en este caso-. Es decir, no es lo mismo que los hábitos de las monjas.
ResponderEliminares peor porque al menos el hombre existe aunque sea un desgraciado machista pero dios no
ResponderEliminar"Buen artículo Lagu. Me parece evidente que el problema se sitúa sólo en los espacios públicos, como bien apunta el autor, por tanto dejemos de lado lo que cada cual haga en la esfera privada.
ResponderEliminarYo creo que hay que respetar a todas las culturas y por supuesto credos religiosos, pero también me parece que se deben respetar los valores tradicionales del país de acogida. Y con eso no quiero decir que tenga que haber un crucifijo plantado en cada aula, ni mucho menos. Pero sí aceptar que hoy por hoy, para bien o para mal, España es un país mayoritariamente católico, y con unas líneas de opinión respecto al tema de la igualdad entre hombres y mujeres muy claras."
De peor nada, la sumisión a otro ser humano es todo lo contrario a la libertad.
ResponderEliminarQue tu -o yo- no creas en la existencia de dios no es más válido a que otro si crea, además no te creas tan soberbio y consideres que tú -o yo- estás en lo cierto.
Que todos los símbolos religiosos deben reservarse a la intimidad y al propio culto en sus respectivos templos me parece de una obviedad tan apabullante que hasta avergüenza tener que debatirlo. Es así desde la pura lógica y también desde la concordia, la justicia, la seguridad, la igualdad, el laicismo del estado, evitar confrontar fes...
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